Álvaro Conesa el 28 de agosto de 2018, clasificado bajo Algo especial, Rutas y Escapadas. Sin Comentarios
El entorno que rodea a Ciudad Real y Albacete
se caracteriza por ser de secano. Grandes extensiones de campo y
llanuras normalmente secas. Como se suele decir por estos lares, “Ancha
es Castilla La-Mancha”. Sin embargo, las Lagunas de Ruidera
son el oasis, un lugar acuático y casi mágico, que a lo largo de casi
30 kilómetros de extensión acogen fauna y flora muy especiales, incluso
amplias zonas destinadas a practicar deportes náuticos.
Las lagunas en sí son un drenaje natural de un acuífero que se encuentra en los campos de Montiel.
Su recorrido dibuja la formación de cascadas y desniveles, aunque la
profundidad y el caudal del agua varía según las estaciones del año. Aún
así, las lagunas de San Pedro, del Rey y de la Colgada son las más grandes de todo este espacio natural. Precisamente, junto a la laguna de la Colgada se localiza el Club Náutico Las Lagunas.
Este se encuentra aproximadamente a 100 km de Albacete y de Ciudad
Real, respectivamente. Sin embargo, el club solo está destinado para el
uso deportivo, no para aficionados.
Vegetación y fauna única
El clima del lugar suele ser muy atractivo para disfrutar de la visita. La temperatura media ronda los 14º, es decir, ni excesivo frío ni calor. Aunque en julio las temperaturas suelen alcanzar casi los 27º.
Por lo que en esos casos se trata de un calor ideal
para darse un chapuzón o refrescarse. Aprovechando las vistas del
paisaje, coloreado por una vegetación de encinas, arbustos y álamos. Por
tanto, la vegetación es la típica de la meseta.
La fauna la constituyen aves acuáticas, conejos,
zorros y los barbos. Sin duda, Lagunas de Ruidera son un paraíso para
las aves acuáticas. En este lugar crecen y viven ánades, fochas y
rapaces como el aguilucho lagunero. Además, en invierno
es posible apreciar al porrón moñudo y al calamón. En general, son
grandes depredadores de las especies acuáticas como el barbo, el blenio y
la boga. Además, todas estas aves suelen anidar en los árboles y en las
laderas de las mesetas y colinas.
Los árboles que predominan en las mesetas son las
encinas, que se mezclan a la perfección con las sabinas, aunque en las
zonas más frías el denso matorral cobra protagonismo. Por otra parte, en
los fondos de los valles los árboles de ribera encuentran su sitio. Los
olmos y los álamos blancos otorgan otra visión y color.
Qué ver
Uno de los secretos que esconden la Lagunas de Ruidera es la Cueva de Montesinos, un lugar que se dio a conocer en El Quijote.
Cervantes, en su obra maestra de la literatura, recrea un encuentro
entre el ingenioso hidalgo, Sancho Panza y Montesinos. La cueva es una
cavidad de roca kárstica, de unos 80 metros de profundidad por la que
corre un pequeño río en su interior y que da a parar a una estancia
grande.
Existen también varias rutas de senderismo. Todas
ellas aptas y fáciles para todas las edades, apostando por hacerlas en
bici o caminando. Principalmente es muy recomendable hacer la ruta de la
Laguna Blanca en bicicleta. Por ejemplo, a lo largo de los recorridos
entre los 3 y 6 km se puede llegar a las ruinas del Castillo de Rochafrida. Se encuentra en lo alto de la colina desde la que se podrán apreciar unas vistas espectaculares.
En el entorno de Lagunas de Ruidera, que está justo a
mitad de camino entre las ciudades de Albacete y Ciudad Real existen
numerosas opciones para alojarse. Elige entre los hoteles con encanto que se encuentran por Albacete y Ciudad Real y disfruta al máximo de un lugar único.
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